La Justicia cordobesa se niega a devolver armas a un hombre acusado por violencia de género
Un hombre que está acusado por hechos de violencia de género no podrá recuperar armas que eran de su propiedad y fueron confiscadas, según lo estableció el Juzgado de Control, Violencia Familiar y Género de la localidad cordobesa de Huinca Renancó.
El juez Claudio Mazuqui consideró que “pueden ser utilizadas como amenaza, extorsión y/o intimidación”, y oficialmente comunicó que las armas habían sido incautadas en el marco de una denuncia por violencia de género.
Además, el acusado ya presentaba antecedentes penales por amenazas calificadas por el empleo de armas y portación de arma de guerra atenuada.
El magistrado tomó esta decisión “como una medida de protección dispuesta en favor de la denunciante-víctima”, indicó el informe del Poder Judicial de la provincia.
La resolución del Juzgado reconoció que, si bien la violencia de género “puede darse con o sin armas”, su posesión por parte del hombre conlleva un riesgo ya que “una agresión ocasionada con arma de fuego, elevan las probabilidades de producir consecuencias mucho más gravosas”.
En esta causa se habían incautado 13 armas de fuego: un fusil, cuatro carabinas, cuatro escopetas, una pistola automática calibre 22, dos rifles de aire comprimido y una pistola de aire comprimido. También se secuestraron 76 cartuchos que contenían unas 2800 municiones y 4 miras.
El juez Mazuqui, en su resolución, recordó que “es obligación del Estado adoptar las medidas necesarias para prevenir la violencia de género, asistir y reparar a las víctimas”.