Habló el misterioso autor de la primera novela del caso Nisman
En su primer reportaje con la prensa, el autor de “El fiscal. Una ficción demasiado parecida a la realidad”, oculto tras el seudónimo R.S Pratt, dialogó sobre su identidad, el libro y los eventuales vínculos con los servicios de inteligencia. ¿Ficción o realidad?
El diálogo se produjo sólo por email. Ricardo, como firma sus mensajes, no quiso hablar por teléfono ni encontrarse personalmente. Su cuenta, alojada en uno de los servidores de email más populares de internet, no es muy original:rspratt2015. ¿Cómo saber si quien escribe es realmente el autor de la novela? Sólo queda confiar en la palabra del Grupo Planeta, dueño del sello que edita el libro. Quien quiera creer, que crea.
A los múltiples interrogantes que acumula el caso Nisman, se sumó en los últimos días este enigma literario: ¿quién es R.S. Pratt? ¿El seudónimo de uno de los diez escritores argentinos más importantes, como sugieren desde la editorial? ¿Una campaña de marketing, como podrían pensar los más escépticos? ¿La jugada de algún sector de los servicios de inteligencia para desacreditar la hipótesis del homicidio, como podría pensar algún paranoico? Las respuestas a esos y otros interrogantes las dio el propio R.S. Pratt a Infobae en la primera entrevista que concedió desde que el libro El fiscal. Una ficción demasiado parecida a la realidad salió a la venta.
En las siete preguntas que aceptó responder, el autor dio nuevos indicios sobre su identidad y reconoció que es “muy posible” que su novela sea relacionada con una operación de inteligencia.
-¿Cuánto de ficción y cuánto de investigación tiene su novela? ¿Tardó 30 días en escribirla como dicen en su editorial?
-Hay mucho de ficción y un poco de adivinación. No podría llamar investigación a la lectura de los diarios durante algunos días del verano. Sobre los supuestos 30 días que me llevó escribir el libro, ese dato es inexacto porque fueron 15.
-¿Tuvo contacto directo con alguno de los protagonistas del caso Nisman?
-Ni directo ni indirecto.
-¿La novela fue una iniciativa suya o de la editorial?
- Fue una propuesta de la editorial que acepté inmediatamente.
-¿Por qué eligió publicarla con seudónimo? ¿Fue una decisión artística, un recurso de marketing o una medida de seguridad?
-La elección del seudónimo no responde a ninguna de las variantes que usted propone. Publicar con nombre falso tiene tan poca importancia como hacerlo con nombre verdadero. Lo importante es el libro.
-¿Cree que el anonimato puede favorecer que la novela sea vinculada con una operación de inteligencia para desacreditar personas o hipótesis en el caso Nisman?
-Es muy posible. A todos nos gusta hablar sin saber. En cambio, sobre lo que sabemos nos gusta callar.
-Circulan por internet distintas teorías sobre quién es usted. Jorge Asís, Ricardo Piglia, Marcelo Birmajer, Ernesto Mallo y Jorge Fernández Díaz fueron algunos de los escritores nombrados. ¿Es alguno de ellos?
-Me gustaría ser una mezcla de Fernández Díaz y Birmajer, dos grandes escritores para mi modo de ver la literatura argentina actual. Lamentablemente soy apenas el debutante R.S. Pratt.
-Me imagino que esta va a ser una pregunta sin respuesta, pero no puedo dejar de hacerla: ¿quién está detrás de R.S. Pratt?
-Se equivoca. Usted tendrá su respuesta. Lamento no poder decirle quién es Pratt porque usted no me lo preguntó. Usted me preguntó quién está detrás, y detrás de Pratt no hay nadie.
Hace tres días Infobae le envió un nuevo mail para hacerle la pregunta de rigor. Todavía aguarda la respuesta.
