Un escándalo sexual involucra al jugador Marcos Rojo en Inglaterra
Se generó un gran revuelo luego de que Sarah Watson, una profesora de fitness, contara que tuvo relaciones con el defensor de Manchester United.
Marcos Rojo está involucrado en un escándalo sexual en Inglaterra, donde reside junto a su mujer, Eugenia Lusardo, y su hija mientras juega en el Manchester United. Todo el lío que llegó a la Justicia comenzó cuando Sarah Watson, una profesora de fitness de 34 años, contó a la prensa británica que tuvo relaciones sexuales con el jugador platense.
Según publicó el Daily Mirror, ellos se conocieron en una fiesta privada de Navidad que organizó el club el año pasado. El jugador la invitó al departamento de un compañero. Cuando llegó, le ofrecieron dinero para tener relaciones, pero ella les aclaró que no era una prostituta. Finalmente terminó en la cama con el jugador de la selección nacional: “Lo hice porque me gustaba, no por dinero ni con ninguna intención de vender la historia”.
Luego de ese encuentro no se volvieron a ver, pero Sarah contó que Marcos le siguió enviando mensajes de texto y correos electrónicos durante casi tres meses. Incluso aseguró que le mandó fotos de él desnudo. Y luego de que el romance se filtró, señaló que desde el entorno del jugador le ofrecieron mucho dinero por su silencio.
Más tarde, los abogados del jugador pidieron una medida cautelar en la Justicia para que la profesora de fitness no pudiera hablar de esta historia en los medios, pero fue rechazada y ella salió a contar detalles del encuentro íntimo que tuvo con Rojo.
“Me amenazaron con tres años de cárcel”, declaró preocupada Sarah Watson, tras haber sido acusada por extorsión por parte de Marcos Rojo. Al parecer ella lo habría querido ‘chantajear’ al pedirle dinero a cambio de no publicar unas imágenes de él desnudo. Por último manifestó que está sufriendo las consecuencias del episodio: “Lo que me pasó muestra cómo los ricos utilizan la Justicia para intimidar a la gente pobre. Es un pequeño error que me ha causado dolor y angustia”.
