Michetti volvió a desafiar a Macri y elevó la tensión en la interna de Pro
La senadora afirmó que, si bien no discute su liderazgo, “cometió un error” al elegir a Rodríguez Larreta; cerca del jefe de gabinete la acusan de “destruir” el proyecto.
Fue, podría decirse, un “sábado de superacción macrista”. O, como lo definió una legisladora, la noche en la que la interna de Pro, hasta ahora reducida a las páginas de los diarios, llegó a la televisión.
Un día después del explícito apoyo brindado por Mauricio Macri a Horacio Rodríguez Larreta, la dupla llegó al programa nocturno de Mirtha Legrand para defender esa decisión y mostrarse en situación de unidad de cara a las PASO del próximo 26 de abril. A la misma hora, pero en el canal América, Gabriela Michetti volvió a mostrar “su tristeza” por la decisión de su jefe político, aunque lejos de moderarse subió la apuesta: la senadora habló de un eventual “error” de Macri si ella ganara, y le pidió a su archirrival interno que se “ponga los pantalones largos” y deje de “usar” al jefe de gobierno porteño en la batalla que sostienen desde hace años, que en un mes vivirá su capítulo decisivo. Aunque para algunos la pelea ya no es más Larreta vs. Michetti, sino Macri vs. Michetti.
“Es una situación difícil, son dos dirigentes muy valiosos. La quiero mucho a Gabriela, pero no puedo ser hipócrita”, contestó Macri cuando la dama de los almuerzos le preguntó por su elección. “Que Horacio haya estado siete años al pie del cañón al lado mío, que conozca al equipo y la tarea le da más instrumentos”, completó Macri, acompañado por un Larreta sonriente que, a su turno, habló de un “equipo que trabaja junto desde hace ocho años”, y evitó confrontar.
Desde Palermo, Michetti prometía “no lastimar” el “liderazgo” de Macri, pero arremetía con todo. “Un error, claro que si yo gano va a ser un error [de Mauricio], si no gano no”, dijo la senadora en el programa Intratables. “Él va a seguir siendo mi líder aunque yo crea que se equivocó en esto y que yo tenga este dolor”, dijo Michetti, que en varios pasajes de la emisión pareció a punto de lagrimear.
La senadora le volvió a pedir a Larreta que “que deje a Mauricio de lado y se ponga los pantalones largos” en las internas, Y habló (sin dar nombres) de las “muchas presiones que hoy hay sobre Macri”, en referencia a su rival y a la estructura comandada por el secretario de Gobierno, Marcos Peña, hoy al servicio de la postulación del jefe de Gabinete.
CONFORMIDAD
Fuentes cercanas a Larreta quedaron conformes luego de la pelea virtual. “El 30 por ciento de los votantes no sabían, hasta ayer, que Mauricio apoya a Horacio. Ahora lo saben y se profundiza la tendencia”, dijeron cerca del jefe de Gabinete. Otros eran más duros: hablaban de un “yoísmo exagerado” de Michetti, que “mete ruido y genera división en el momento en el que mejor está Macri”.
Puertas afuera, el discurso de ese sector se alineó con el de Macri. “Un director técnico tiene una decisión difícil: que a la cancha entren los mejores. Y el mejor, en este caso, es Horacio”, afirmó a LA NACION Patricia Bullrich, aliada de Pro y enrolada en el bando del jefe de Gabinete.
Sabedora de las críticas que le hacen sus rivales, Michetti dijo en Intratables: “Si Mauricio no me considerara capaz, no me habría ofrecido la vicepresidencia”.
Cerca de ella intentaron calmar las agitadas aguas de la interna. “Somos gente del mismo equipo, estamos trabajando en el mismo proyecto, con la misma gente, en la misma gestión. Lo que estamos ofreciendo a la gente es que elija entre un estilo u otro estilo. No hay ninguna cosa dramática, ni derrotas, ni nada”, dijo el titular del bloque de diputados de Pro, Federico Pinedo, jefe de campaña de Michetti.
Dirigentes cercanos a la ex vicejefa de gobierno descreían de los números de la encuesta de Poliarquía publicada por LA NACION en su edición de ayer, que hablaba de una leve diferencia (1,5 puntos) en favor del jefe de Gabinete. “Nuestros números nos dan por lo menos nueve puntos de ventaja para Gabriela. Estamos tranquilos”, dijo ayer una fuente cercana a Michetti.
Mientras la guerra verbal recién parece estar comenzando, algunas señales de tregua comenzaron a evidenciarse. Ambos candidatos aceptaron compartir búnker la noche del 26 de abril, casi con seguridad en Costa Salguero, lugar preferido por el macrismo. También comparten la lista de legisladores porteños, encabezada por Francisco Quintana, y cuyos integrantes intentan hacer equilibrio para no provocar malentendidos. De todos modos, y si el voltaje de las declaraciones se mantiene alto, nadie asegura que la paz en esos rubros se mantenga.
De cara a los comicios, Larreta y Michetti prometen seguir recorriendo barrios con propuestas concretas. Michetti hará “dos o tres comunas por día” y hará “control de gestión” en los ministerios porteños. Larreta, prometen a su lado, hará “lo que hace siempre. Recorrer, hablar con la gente, estar para dar soluciones”.
Macri, que pasado mañana estará inaugurando la flamante sede del gobierno porteño en Parque Patricios junto al arquitecto Norman Foster, observará los movimientos de sus dirigentes. Aunque ya, y sobre todo después del sábado, se sabe de sobra dónde están sus simpatías en una pelea que, definitivamente, ya es su pelea..