Un diputado contó que su hijo pidió que vote a favor del aborto: “Vas a permitir que esto deje de ser tabú”
Hoy se retomó con el proyecto de la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo, por lo que muchos legisladores compartieron sus distintas opiniones sobre el aborto en las redes sociales. En este caso, se trata del legislador porteño Juan Manuel Valdés, quien escribió una carta pública en Twitter para su papá, Eduardo Valdés, diputado por la Ciudad de Buenos Aires del Frente de Todos.
Con el comienzo de la sesión especial y maratónica en la Cámara de Diputados para aprobar la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo que presentó el Poder Ejecutivo y el “Plan de los 1000 días”, el cual establece una protección integral a la mujer embarazada y al niño hasta los primeros tres años de vida, las redes sociales fueron invadidas por colores verdes y celestes.
Bajo este contexto, el legislador porteño Juan Manuel Valdés publicó una carta abierta dirigida a su padre, Eduardo Valdés, quien es diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires por el Frente de Todos, pidiéndole que hoy durante la sesión vote a favor del aborto.
“Algunos debates, y en especial los verdaderamente transformadores, se meten en nuestras casas, en nuestras familias, y entran por debajo de la piel. A mi viejo lo entiendo y lo quiero, pero sobre todo porque lo respeto, le escribo estas palabras. #SeráLey”, escribió el legislador en su cuenta de Twitter junto a la carta en cuestión.
La carta completa:
“Querido viejo: Nunca pensé escribir estas líneas, menos publicarlas. Pero ambos somos ya personas públicas, con responsabilidades institucionales que nos trascienden y con el poder que nos dieron los votos para aprobar leyes que cambien la vida de la gente. Vos en el Congreso y yo en la Legislatura de la Ciudad tenemos la potestad de proponer y sancionar las normas que rigen a toda la sociedad. El debate del que vas a participar esta semana será histórico, sentando precedente en toda la región y será estudiado por las futuras generaciones.
Siempre me enseñaste a ser solidario con el prójimo. A sentir como propio el dolor ajeno. Desde ahí me hiciste peronista y desde tus acciones aprendí que incluso estabas dispuesto a transgredir los dogmas con los que te criaste para ser fieles a tus valores. Así fue cuando armaste el primer festival de concientización sobre el Sida de la historia argentina; impulsando la ley de trasplantes de órganos; siendo el único legislador del PJ en votar a favor de la Unión Civil para personas del mismo sexo en el año 2000, cuando el clero la rechazaba; o cuando asumiste la defensa de Gabriel, ese pibe abusado por Grassi. Siempre fuiste coherente con una forma de ver el mundo y los derechos sociales.
Sé que cuando decís que no pudiste deconstruirte lo hacés con la honestidad que te caracteriza. Que para tu generación hay debates en los que te sentís ajeno. Pero quiero que sepas que la discusión sobre la interrupción voluntaria del embarazo no es sobre generaciones o modas. Ni siquiera es una discusión sobre tus convicciones personales, es sobre la Justicia Social. Nadie va a obligarte a que apoyes el aborto. Nadie siquiera debe sentir agrado con esa situación traumática. Mucho menos será obligatorio que las personas que no lo deseen interrumpan su gestación. Pero sí se trata de acompañar, dignificar la vida de quienes por diversas razones las llevan a tener que asumir esa decisión. Poner en riesgo la salud y también vivir con el estigma de la clandestinidad es una situación que nadie merece. Mucho menos ser llamada criminal. Incluso desde la Fe que aprendí de vos, siempre creí que Jesús vino a ser uno más de nosotros, asumiendo en su propio cuerpo nuestros dolores y flagelos, no para castigarnos ni disciplinarnos.
En esta pandemia aprendimos el valor de la salud pública para prevenir e igualar posiciones en nuestra sociedad. Que haya ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda es una inmoralidad que no podemos consentir. Todos y todas merecemos la misma respuesta del Estado cuando de la vida y la salud se trata y así lo plantean los dos proyectos presentados por el Gobierno que tanto apoyás, y desde el cual ponés todo de vos para que el país salga adelante.
Recuerdo cómo en medio de la cuarentena más estricta me reprochaste en televisión que anduviera recorriendo barrios. Dijiste que me ponía en riesgo. Aunque me enojó escucharlo, sé que lo hiciste por el amor que me tenés. Desde ese mismo amor te pido que pienses bien el voto que vas a emitir. Votando a favor vas a permitir que esto deje de ser tabú y la sociedad sea un poco más justa mientras vos mantenés en pie todas tus convicciones. Pensá en lo que te diría esa hija que siempre me dijiste que querías tener. O en tus posibles nietas. Ellas te pedirían que así lo hagas.
Un abrazo, de esos que extraño darte.
Juan”.