Ángel de Brito disparó contra Jorge Rial por la crítica a la cámara oculta a La Bomba
El escándalo de Gladys La Bomba Tucumana en la pista del Cantando, con esa desencajada crítica al vestuario que le brindaron desde la producción, trascendió y se viralizó. Claro que lo más repudiable llegó después, cuando esgrimió frases muy poco afortunadas, en el marco de una cámara oculta que le pusieron en un bar de La Flia.
En ese registro, que capturó y mostró LAM, se ve a la cantante vociferar: “No puede haber forma que yo me vea más o menos bien adentro de esto. Pero si esto se lo ponés a cualquiera… Esto es de una villera boliviana“.
Ese momento televisivo cuestionable fue abordado por Intrusos, donde Jorge Rial desaprobó enfáticamente la utilización del recurso de grabar de manera oculta y lo tildó como un mecanismo espurio.
Ángel de Brito recogió el guante de esa crítica del hombre de América y este jueves desarrolló una explicación de lo acontecido, recargado con unas fortísimas definiciones de Intrusos, sin utilizar nombres propios, pero ofreciendo referencias claras.
El conductor de LAM miró a la cámara y con un lenguaje corporal batallador exteriorizó: “La frase desafortunada de la Bomba Tucumana, que pasamos ayer en el programa, no era una cámara oculta. Fue un error de este programa presentarlo como una cámara oculta, porque era algo que grabó Maite (Peñoñori) y nuestro cámara en el bar, que es un lugar abierto y Gladys sabía que estaba la cámara y nos preguntó si la habíamos grabado. Sabía que había una cámara frente a ella. Quizás lo editamos como una cámara oculta y no tendría que haber sido así“.
Luego de esa justificación del accionar de su programa, de Brito disparó con munición pesada contra Rial: “Lo digo porque ayer vi a mucha gente preocupada por este tema, gente que ha arruinado vidas con cámaras ocultas y ayer eran todas carmelitas descalzas. Decían ‘¿cómo se pasan cosas privadas?’, y hace dos días estaban pasando el audio de Lourdes Sánchez, con lo que había dicho de Laurita. No se les cae la cara, pero por eso la gente los abandonó“.
Se armó un escenario de guerra entre los dos conductores de los ciclos más exitosos del mundo del espectáculo.
