Echaron a Julián Serrano de un pueblo por violar los protocolos de coronavirus
Los vecinos de Cerrito se mostraron indignados con el influencer y cantante.
Escracharon a Julián Serrano vecino del municipio de Cerrito, ya que ingresó a la localidad y no se permiten “visitantes” por la pandemia por el coronavirus. Recordemos que el influencer vive en Paraná y hasta el momento había permanecido allí. Sin embargo en la últimas horas se mostró con unas amigas comiendo un sadwich y sin distancia social.
“Es el colmo. Nosotros hace seis meses que estamos encerrados y toda una vida viviendo en el pueblo. Viene gente de afuera, pone un negocio y tiene todos los privilegios; pero vos te tenés que encerrar. A mi negocio sólo lo atiendo por la ventana y mirá vos lo que te enterás después. Que traen el virus de afuera. Parece que el virus ahí no está. Capaz que está sólo por algunas calles“, señaló una vecina de Cerrito.
Otro vecino comentó en Portal Uno: “Es así gente, uno se cuida y cuida a su familia, pero llegan estos ‘personajes’ que mienten en el control policial de la avenida Racedo de Cerrito diciendo que venían a trabajar al resto bar y resulta que son hermanas del dueño del bar y que son oriundas de Paraná; y el tal Julián Serrano, que según me dicen es famoso, pero la verdad es que no lo conozco; también es de Paraná. No los veo trabajando, los veo comiendo y de lo lindo. Si van a mentir, por lo menos sáquense una foto con una bandeja en la mano. Gracias a Dios los denunciaron como corresponde y fueron retirados del pueblo, pero ya habían estado en contacto con muchas personas. ¡Así estamos, país! Gracias por su irresponsabilidad con la sociedad“.
Al ver tanta enojo, el dueño del local emitió un comunicado: “No sabíamos la magnitud del caso y a su vez éramos ajenos a ciertas reglas que se cumplen en el pueblo, ya que sólo nos abocamos a nuestro rubro. Hablamos en el control policial e informamos que vendrían cuatro personas de la ciudad de Paraná, dos de las cuales son encargadas de la publicidad del local. Vinieron a trabajar y acudieron con sus respectivas parejas, porque no saben manejar“. ”
“No lo informamos a la comunidad ya que no queríamos aglomeración de personas. Sólo tuvieron contacto con una moza del lugar y respetaron los protocolos correspondientes“, concluyeron.