El dramático relato de Gustavo López sobre su internación por covid-19
El coronavirus afectó a más de 462 mil personas en nuestro país y algunos de los contagiados vivieron terribles experiencias con esta enfermedad. Uno de los que sufrió esta infección fue el periodista Gustavo López, quien, actualmente recuperado, se animó a revelar su duro paso por la clínica.
En una charla teléfonica con Marcelo Palacios, su compañero de radio en el programa Un Buen Momento, López relató el complicado momento que tuvo atravesar y, emocionado, detalló cómo fue su paso a paso con el virus en su organismo.
“La verdad que tengo un montón de sentimientos encontrados, extrañé mucho este momento… La pasé muy mal, quiero contarle a la gente mi experiencia para que también le sirva…” comenzó conmovido el periodista.
Sin embargo, Gustavo explicó cómo fue el momento en el que recibió el resultado detectable: “Cuando me dio positivo lo tomé con naturalidad. Hace seis meses que venimos hablando del tema e informando. Fue un impacto, pero nada grave. Lo pasé bastante bien la primera semana. De repente veía que por ahí me faltaba un poco el aire en el final de los programas de la tarde, pero bien”.
A pesar de eso, la situación se fue complicando con el correr de los días: “Yo venía fenómeno, pero el día previo a la final de la Champions me empecé a sentir muy mal, pasé mal la noche. El domingo le dije a Laura, mi señora, que tenía mucha fiebre. Transpiré, mojaba la almohada, las sábanas, frazadas, colchón. Llamamos al médico y dijo que no era normal. Me vinieron a buscar en una ambulancia, con dos personas como las vemos en la televisión, como astronautas…”
“No me llevé ni un cepillo de dientes, pensé que iba y volvía. Me hicieron una tomografía, y me llevaron a una habitación y ahí me quedé 8 días… Tenía 38, 39, 39.5 de fiebre. Los médicos me atendieron diez puntos pero me dijeron ‘algunas cosas están bien, pero no salió todo bien, hay algo que no nos gusta” relató con la voz quebrada el especialista en deportes.
Además, Gustavo López recordó que el coronavirus no solo le trajo los síntomas de una gripe, sino que complicó su sistema respiratorio: “Me afectó los pulmones, el virus empezó a trabajar en mi cuerpo. Se me complicó. Estaba solo en la habitación. Es una enfermedad durísima, nadie te puede acariciar, dar la mano, venirte a visitar. Estás ahí solo…”.
A pesar de haber recibido cientos de mensajes de aliento por parte de sus seres queridos, el periodista confesó que la tristeza lo inundaba hasta el punto tal de querer manterse alejado del mundo exterior: “Hubiese querido no tener el teléfono a mano. Pero me salvó porque era el contacto con los médicos, porque no pueden entrar a cada rato a la habitación. Es un ratito que te ven y en un momento me llaman y me dicen ‘hay cosas que no nos gustan y te recomendamos ponerte plasma’. Es todo un tema. No es 100 % seguro, tenés que firmar que asumís la responsabilidad de que te puede hacer bien o mal, solo, son tres hojas… Lo leí y me entregué…”
Por otra parte, el conductor de televisión explicó que dejó en manos del personal de salud todas las decisiones, pero que los protocolos no lo ayudaron a sentirse más cómodo: “No se ni dónde queda la clínica. Fui en ambulancia y me volví en ambulancia. A los médicos no les conocí la cara hasta ahora por las videollamadas. Yo veía dos astronautas. La doctora que me vino a colocar el plasma también me tranquilizó con el tema. Pasé una noche horrible, pésima, no sabía si me iba a rendir o no… Al día siguiente la pasé peor todavía porque tenía más fiebre que antes, ahí pensé realmente que no lo podía superar… La vi fea. Me levanté pensando que estaba muy complicado”.
“Llamé a mi esposa con un mensaje absolutamente negativo y ella me levantó. Estás loco, levantate, de ahí vas a salir. Empecé a sacar la angustia de adentro, me hizo muy bien escuchar música, empecé a cantar, fue como una terapia. También el aluvión de los mensajes. No leía ningún mensaje al principio, pensé que me podía pasar lo peor y lloré 8 días seguidos. Hice un video para la gente que me apoyó, pero era horrible. Me llamó mi señora después de eso y lloramos los dos. Me vi frágil y tenía la voz frágil” continuó relatando entre lágrimas.
Ya recuperado y en su domicilio, recordando aquel duro momento, López reveló el momento más crítico de su internación: “Nunca tuve respirador ni estuve cerca de la muerte pero en un momento me vi muy complicado. Y la verdad me sostuvo una frase… Un día le dije a los médicos: ‘Yo lo único que quiero saber es si vuelvo a mi casa a abrazar a mi familia’. Ellos me dijeron te ‘lo vamos a garantizar’. Eso fue lo que me mantuvo en pie”. (Paparazzi)
