Nada menos que por la Copa
Definen su futuro en la Libertadores. Para el Fortín, es todo o nada. Si gana el Xeneize entra directo a la fase de grupos y Estudiantes jugará el repechaje. Si empatan, habrá alargue y penales.
El Boca-Vélez de esta noche, que definirá la suerte de ambos, y también la de Estudiantes, en la Copa Libertadores, es un partido importante de por sí, por lo que se juega en el mismo, pero al que se llegó luego de algunos artilugios, sospechados y protestados por la gente del Fortín, y los cuales fueron muy discutidos en la mesa de la AFA y a la vez mediáticamente. Boca, o entra al grupo directamente o juega el repechaje. Vélez, la única chance que tiene es ingresar a la zona. Si hay empate, habrá alargue y penales. Mientras tanto Estudiantes espera agazapado una victoria xeneize para jugar en esa primera fase clasificatoria.
Tras finalizar la temporada 2013-2014, si bien Vélez y Boca habían terminado con la misma cantidad de puntos (61) en la tabla general, el que entraba a la Copa era el elenco de Liniers por tener mejor diferencia de gol que el Xeneize. Pero unos días después apareció un vericueto en el reglamento de la AFA que terminó decantando en este partido desempate.
El artículo 112 del reglamento de AFA dice que “se clasificará a la Copa Libertadores el que registre una mejor diferencia de gol”. De eso se agarró la directiva velezana. Sin embargo, Boca fundamentó su posición en el artículo 111 del mismo reglamento, que indica que debe jugarse “un partido desempate en igualdad de posiciones” en la tabla general. Finalmente, tras largas y acaloradas discusiones, Raúl Gamez, presidente de Vélez, aceptó a regañadientes jugar este partido.
En lo que respecta a lo futbolístico, los dos equipos ya están confirmados por sus entrenadores. Rodolfo Arruabarrena se inclinó por Federico Carrizo para que sea el atacante por la izquierda en lugar de Andrés Chávez, que aún no está en las mejores condiciones físicas ni futbolísticas. A la vez, el Vasco optó por Guillermo Burdisso para formar la dupla central con el “Cata” Díaz.
Por el lado de Vélez, todo estuvo más claro desde hace un par de semanas, cuando Miguel Ángel Russo optó por trabajar de lleno con una formación titular en los entrenamientos y otra alternativa para jugar en Mar del Plata. Aquí fue donde se inclinó por Milton Caraglio para que sea el compañero en la delantera de Mariano Pavone.
Sobre este partido, Arruabarrena dijo: “Trataremos de tener la pelota, que es lo que nos hace fuertes y ser los ganadores del partido. Va a ser complicado. Ellos trajeron jugadores de experiencia y jerarquía.” Por su parte, el delantero del Fortín, Milton Caragio se esperanzó: “Sería estupendo clasificar a la Copa Libertadores. Nos preparamos con tranquilidad para sacar el partido adelante.”
