Muere el comerciante al que le dispararon en la cara porque revisaba un secarropas abandonado
El comerciante que había sido atacado de un escopetazo en el rostro por un vecino que lo increpó porque estaba revisando un secarropas abandonado en la calle, en la localidad bonaerense de San Fernando, murió tras agonizar dos semanas en un hospital de la zona, informaron hoy fuentes judiciales.
Se trata de Ariel Augusto Sanz Segovia (36), quien falleció ayer a la mañana en el hospital Petrona de Cordero, ubicado en el mencionado municipio de la zona norte del conurbano, donde estuvo internado desde el 25 de mayo último.
Fuentes judiciales informaron a Télam que el fiscal Alejandro Musso indagará este viernes al sospechoso detenido, identificado como Santos Lemos (58), por el delito de “homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego”.
El crimen ocurrió el lunes 25 de mayo en el cruce de Roberto Payró y Alberto Gilardoni del barrio Villa Jardín cuando la víctima, propietaria de una rotisería situada a unas 15 cuadras de allí, regresaba de entregar algunos pedidos junto a un empleado suyo a bordo de un Renault Symbol.
Durante el trayecto, el comerciante observó que había un secarropas abandonado y detuvo la marcha para inspeccionarlo.
Pamela, una de las hermanas del hombre, relató a Télam que Sanz Segovia “en su momento había hecho un curso” de reparación de electrodomésticos y le dijo al empleado que si estaba “rescatable” se lo arreglaba para que se lo lleve a su casa.
Según las fuentes, mientras el empleado descendió del vehículo y se acercó al artefacto, un vecino salió imprevistamente de su vivienda,
“Dejá ese secarropas ahí”, lo amenazó al hombre que lo apuntó con una escopeta, por lo que volvió a subir al auto para irse del lugar.
Sin embargo, desde pocos metros el agresor efectuó un disparo contra el comerciante que, según su hermana, solo le había respondido “bueno, está bien maestro”.
Las perdigonadas impactaron en el rostro de Sanz Segovia, quien herido aceleró rápidamente hasta una posta policial ubicada a unas pocas cuadras, en Uruguay y Guatemala.
“Ni siquiera hubo una discusión previa o un intercambio de palabras entre ellos”, aseguró Pamela.
El comerciante fue trasladado de urgencia al hospital de San Fernando, donde quedó internado en grave estado en terapia intensiva ya que había perdido uno de sus ojos, entre otras lesiones, hasta que ayer murió.
Efectivos de la comisaría 4ta. de San Fernando fueron alertados por el ataque y el fiscal Musso dispuso un allanamiento de urgencia.
Los voceros añadieron que la Policía detuvo a Lemos, a quien le secuestró una escopeta Centauro calibre .14.
“Aunque no nos devuelve a mi hermano, queremos que se haga Justicia y que esto no quede así, que este hombre pague por lo que hizo”, afirmó Iriel.