viernes, noviembre 22, 2024
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Fatiga ocular: cinco consejos para relajar la vista en tiempos de home office

 

La cuarentena social, preventiva y obligatoria llevó a muchos trabajadores a adecuarse a la modalidad del home office. Si bien trabajar desde casa tiene varios beneficios, también puede traer efectos negativos. Uno de ellos tiene que ver con que estar todo el día frente a una pantalla, puede causar un intolerable cansancio en la vista. Para ello, existe el término fatiga ocular.

La fatiga ocular ocurre cuando una persona fuerza los ojos tras darle un intenso uso, sin lugar al descanso. Esto puede pasar en la ruta cuando tratamos visualizar distancias muy largas, con el celular antes de irse a dormir o con la computadora mientras se estudio o trabaja.

Los síntomas son muy comunes y reconocibles. Ellos pueden ser: dolor en los ojos, picazón, ardor y cansancio, ojos secos o llorosos, visión borrosa, dolor de cabeza, hombros y espalda, dificultad en mantener los ojos abiertos y mantener la concentración. A pesar de resultar tedioso, la fatiga ocular no es grave y puede solucionarse con tan solo descansar la mirada. Para ello, existen cinco breves consejos.

La American Academy of Ophtalmology reveló cuáles son las formas más simples para combatirla. En primer lugar, sugiere tomarse descansos cada un tiempo determinado. Para ello, alejar los ojos de la pantalla y moverse un poco. 

Otra de las recomendaciones tiene que ver no sólo con la postura de la persona, sino también con la de la pantalla. A la hora de trabajar, encontrar una posición cómoda y ajustar la pantalla de la computadora para mirar ligeramente hacia abajo.

La institución también ofrece una técnica llamada “20-20-20”. Esta genialidad consiste en mirar un objeto que se encuentra a 20 pies de distancia, que equivale a seis metros. Hacerlo por 20 segundos y repetirlo cada 20 minutos. 

A su vez, la iluminación es otra pieza clave para cuidar la vista. Mayo Clinic aconseja no trabajar en lugares muy iluminados, para no forzar la vista y generarle un daño.

Por último, mejorar la calidad del aire en tu espacio puede servir para evitar sequedad en los ojos. Para ello, no trabajar con humo, aire acondicionado ni ventilador. El aire libre siempre es una buena opción.

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