Martín Guzmán dijo que no se seguirá pagando deuda con reservas del Banco Central
Luego de que el Fondo Monetario Internacional (FMI) recomendara un “alivio sustancial” en la deuda, de hasta U$S85.000 millones en la próxima década, el ministro de Economía, Martín Guzmán, llamó a nuevas conversaciones con acreedores y advirtió que ya no hay margen para seguir pagando vencimientos con reservas del Banco Central.
“Ya llegamos a un límite del uso de reservas para pagar deuda en moneda extranjera. No podemos seguir haciéndolo”, dijo el ministro en una videoconferencia, en la que invitó a los acreedores de la Argentina a retomar las conversaciones las semana próxima. Esas charlas serán, “dadas las circunstancias”, a distancia.
“El Gobierno invita a los tenedores de bonos a embarcarse la próxima semana en discusiones constructivas”, dijo el ministro. “Vamos a priorizar conversaciones con bonistas que demuestren ser acreedores significativos”, agregó.
Por primera vez, el Ministerio de Economía entregó proyecciones sobre lo que, espera, será el desempeño de la economía. Aclaró, sin embargo, que las estimaciones son previas a la crisis del coronavirus, que llevó al Gobierno a declarar la situación de aislamiento total, al menos, hasta el 31 de marzo.
Así y todo, las proyecciones fueron negativas. Sin contar el impacto del coronavirus, Guzmán estimó para 2020 una recesión de entre 1% y 1,5% y un déficit primario (antes del pago de intereses) de entre 1,1% y 1,5% del PBI.
“Este análisis de sustentabilidad de deuda se hizo antes de la situación del coronavirus. Estamos todos aprendiendo y monitoreando día a día lo que este shock implica para la economía del mundo y hacemos lo mismo en la Argentina. Es obvio que va a haber revisiones para los números de 2020 y posiblemente deberá haberlas para los de 2021, pero esperamos que no afecten las previsiones de mediano y largo plazo”, dijo Guzmán.
“Hoy está claro que estamos en tiempos de incertidumbre muy alta y eso es algo que debe tenerse en cuenta. Esto es algo que era cierto antes del coronavirus y ahora es aún más cierto”, dijo Guzmán durante la videoconferencia, que se desarrolló en inglés.
El Gobierno estimó un sendero de crecimiento de en torno a 3% para 2021, 2,5% para 2022 y entre 1,5 y 2 por ciento a partir de 2023. El superávit fiscal (la diferencia positiva entre ingresos y gastos que permitiría contar con recursos genuinos para pagar deuda) llegaría a partir de 2023, según la previsión oficial.
“La deuda es infinanciable, inasequible e insostenible”, dijo el ministro, que negoció en las últimas semanas el apoyo del staff técnico del FMI, como antesala a una oferta a acreedores que se anticipa más agresiva de lo previsto inicialmente.
“Estamos absolutamente comprometidos con una solución sustentable. La meta de esta administración es ponerle fin al ciclo del sobreendeudamiento y sentar condiciones para la estabilidad de largo plazo” agregó Guzmán en otro pasaje de su exposición, que no tuvo lugar para preguntas.
“Nuestra prioridad es, y seguirá siendo, la de apoyar a la recuperación de Argentina y a la protección de los grupos más vulnerables. En última instancia, nuestro objetivo es ayudar a sentar las bases para una economía estable y próspera que pueda crear empleos y elevar el nivel de vida en beneficio de todos los argentinos”, afirmó el ministro.
(TN)