Un hombre que robó un queso, aceite y chocolates murió tras ser golpeado por dos custodios de un supermercado
Un hombre que había robado productos de un supermercado del barrio porteño de San Telmo murió tras ser golpeado por dos custodios del comercio que lo habían reducido y que luego quedaron detenidos, informaron hoy fuentes policiales.
El hecho, que se dio a conocer hoy, ocurrió el viernes último alrededor de las 19 a metros de un supermercado Coto ubicado sobre avenida Brasil al 500, en dicho barrio de la ciudad de Buenos Aires.
Voceros de la fuerza informaron a Télam que efectivos de la Policía de la Ciudad se trasladaron a dicho comercio a raíz de un llamado al 911 que alertaba acerca de un hombre detenido por particulares.
Al llegar al lugar, los uniformados encontraron a un hombre de 68 años retenido por dos empleados de seguridad del supermercado, quienes les manifestaron que esa persona había sustraído del local dos chocolates, un queso fresco de 500 gramos y una botella de vidrio de aceite de oliva de 500 mililitros, por lo que procedieron a detenerlo.
De acuerdo a las fuentes, mientras los oficiales realizaban las actuaciones correspondientes, el hombre perdió el conocimiento, por lo que de inmediato solicitaron la presencia de una ambulancia del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME).
En tanto, la empleada de una panadería ubicada en cercanías del lugar le relató a los policías que el hombre, antes ser reducido, le arrojó la botella de aceite de vidrio a uno de los custodios, ante lo cual ambos comenzaron a efectuarle varios golpes de puño.
Por su parte, ante la demora de la ambulancia del SAME y los reiterados reclamos al 911, los efectivos comenzaron a practicarle maniobras de resucitación cardiopulmonar (RCP) al hombre.
Una vez arribada la ambulancia, la víctima fue trasladada al hospital Argerich del barrio porteño de La Boca, donde a las 19.45 se constató su fallecimiento, añadieron los informantes.
Intervino en la causa el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional 33, a cargo de Darío Osvaldo, quien ordenó la detención de los empleados de seguridad del comercio, que permanezcan incomunicados y que el cadáver de la víctima sea trasladado al Cuerpo Médico Forense para realizar la autopsia correspondiente.