“Muchas mujeres no llevan el cabello rizado a una entrevista de trabajo por miedo a que no se lo den”
A Morrie Jacks le han dicho en entrevistas de trabajo que su perfil se ajusta perfectamente a lo que buscan, excepto por algo.
Es su cabello, que esta agente de bienes raíces estadounidense de 51 años lleva usando desde hace dos décadas y por el que dice haberse sentido juzgada en varias ocasiones.
Jacks, quien vive en California, y le cuentó a la BBC que en ambientes profesionales a veces le han dicho que “tienen una cultura de trabajo con un cierto look al que hay que seguir donde no se permiten trenzas o dreadlocks”.
“Me han hecho sentir como si mi cabello fuese ofensivo”, dice.
Es por esto que se alegró al saber que California se convirtió esta semana en el primer estado de Estados Unidos en promulgar una ley que prohíbe la discriminación por el aspecto del pelo.
“Nos han dicho muchas veces que nos vemos poco profesionales o descuidadas”, dice en referencia a las mujeres negras. “Es una forma de racismo que puede causar hasta odio propio”.
La propuesta fue introducida al cuerpo legislativo del estado por la senador Holly Mitchell, quien le llamó “Create a Respectful and Open Workplace for Natural Hair” (“Crear un espacio abierto y respetuoso hacia quienes llevan el pelo natural”) o C.R.O.W.N., un acrónimo que en español significa “corona”.
El texto de la ley, que entra en vigencia a partir de enero de 2020, aclara que los rasgos físicos asociados históricamente con la raza, como la textura y el peinado del cabello, deben protegerse de la discriminación en los sitios de empleo y en las escuelas públicas y las chárter (que reciben fondos públicos pero son establecidas por privados).
Pese a que los afros han estado protegidos contra la discriminación en EE.UU. desde la promulgación en 1964 de la Ley de derechos civiles, no se incluyen explícitamente otras representaciones “como las trenzas, los twists y los locs”, advierte Mitchell.
Carolina Contreras, alias “Miss Rizos”, es una empresaria dominicano-estadounidense que se crió en EE.UU. y abrió la primera peluquería solamente para cabellos rizados en la isla en 2014.