lunes, noviembre 25, 2024
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Dermatitis Atópica: la enfermedad que empeora con el frío

 

El aire seco, los cambios bruscos de temperatura y los espacios calefaccionados disminuyen la humedad del ambiente, por lo que impactan en la hidratación de la piel y generan un microclima desfavorable para quienes tienen Dermatitis Atópica

Por esta razón, la Asociación Civil de Dermatitis Atópica Argentina (ADAR) aprovechó el inicio del invierno para concientizar al respecto, presentar en sociedad su conformación como organización e invitó a ‘ponerse en la piel’ de los pacientes.

La Dermatitis Atópica es una enfermedad inflamatoria crónica -no contagiosa- que altera el sistema inmunitario y, en su variante severa, se manifiesta frecuentemente con brotes en la piel, picazón intensa y persistente, dolor, enrojecimiento, costras, secreciones e infecciones.

Está comprobado que las personas que la padecen experimentan más picazón en invierno porque la piel sensible de estos pacientes reacciona ante los cambios bruscos de temperatura y Mariana Palacios, mamá de una hija con Dermatitis Atópica y presidente de ADAR, explicó detalles acerca de cómo vivir con la enfermedad.

“Al vivir con Dermatitis Atópica, estás muy pendiente de tu piel todo el tiempo. A dónde vas y cómo te vestís son aspectos menores para cualquiera, pero pueden determinar la aparición de brotes en la piel y una picazón intensa difícil de manejar, que te puede impedir concentrarte en una reunión social o laboral y no dejarte dormir en toda la noche”, sostuvo.

Esta enfermedad se presenta como una picazón intensa y enrojecimiento de ciertas zonas de la piel como el cuero cabelludo, la cara, el cuello, la zona de pliegues o como eczema crónico de las manos y también puede comprometer la zona genital, pezones y areolas y provocar un gran impacto en la calidad de vida.

La Dermatitis Atópica aparece mayoritariamente en la infancia y, en un porcentaje importante de casos, con los años el cuadrose va revirtiendo, pero en 3 de cada 10 pacientes la condición continúa tras la pubertad y algunas personas inclusive experimentan los primeros síntomas recién en la adultez.

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