Cuatro de cada diez porteños admiten no estar informados sobre la donación de órganos
En el Día de la donación de órganos, un sondeo revela lo que piensan y cuánto saben los porteños sobre el tema: pese a la “Ley Justina”, que se reglamentó en enero de este año, cuatro de cada diez admitieron que no están lo suficientemente informados sobre la donación de órganos.
La falta de información generó situaciones como que el 30,3% no desee ser donante tras su muerte o que el 62,7 % crea que existe un mercado negro de tráfico de órganos.
Además, el 37,8 % de los encuestados admitió que sería capaz de acudir a ese mercado ilegal con tal de encontrar un órgano compatible, de acuerdo al estudio de la Universidad Abierta Interamericana (UAI).
El análisis incluyó las respuestas de 700 participantes mayores de 16 años de la Ciudad de Buenos Aires, pero a pesar de ser número locales reflejan la falta de información con la que cuenta el público acerca de la donación de órganos.
De hecho, el 41,1% de los participantes reclamó que no tiene la información que le gustaría tener sobre el tema, y un 82 % consideró que los medios deberían difundir más contenidos acerca de la donación de órganos y tejidos.
Pero lo más notable de la encuesta es que, si bien el 86,3 % de los encuestados donaría un órgano en vida a un amigo, un familiar o un completo extraño, el 30,3 % estaría dispuesto a dejar constancia sobre su negativa a donar tras su muerte.
La reglamentación de la ley N° 27.447, también llamada Ley Justina por Justina Lo Cane, la nena de 12 años que murió en la espera de un corazón, estipula que toda persona mayor de 18 años es posible donante salvo que haya expresado lo contrario.
El 53,5% de los encuestados por la UAI afirmó que la Ley Justina es positiva, y el 61,1% opinó que las listas de prioridad para determinar el orden de los trasplantes “funcionan honestamente”.