Quién es el hombre que intentó ingresar a la Casa Rosada con un arma calibre 44 para ver al presidente Macri
La Casa Rosada se vio alterada por el intento de un hombre fuertemente armado de entrar al lugar para lograr una audiencia con el presidente Mauricio Macri.
El sospechoso, que fue detenido poco después de acercarse a la reja de entrada, se llama Francisco Ariel Muñiz (35) y en su momento intentó postularse como candidato del PRO como consejero escolar suplente en la ciudad de General Pinto, provincia de Buenos Aires.
El hombre -que tiene un domicilio registrado en San Justo- se presentó alrededor de las 9 de la mañana a la puerta de entrada en la calle Balcarce al 78. Al acercarse, mantuvo un diálogo con efectivos de seguridad de la PFA, a quienes les aseguró que tenía agendada una audiencia con el mandatario.
Una vez que los custodios de la Casa de Gobierno confirmaron que no existía tal cita, lo invitaron a retirarse. A lo que Muñiz respondió con un acto insólito: lanzó un estuche plateado a uno de los patios internos y salió corriendo.
Efectivos de la Policía Federal lograron detenerlo a los pocos metros, en la boca del subte, ubicada en Balcarce e Hipólito Yrigoyen. Mientras tanto, responsables de la Brigada Anti-Explosivos, comprobaron que en el interior del maletín había un poderoso revólver Magnum Taurus .44 sin balas en el tambor según aseguró la ministra Patricia Bullrich y con el número de serie limado. Ahora, se lo acusa del delito de intimidación pública, con una causa en el Juzgado Federal Nº11.
Muñiz se mantuvo ligado al PRO en la ciudad bonaerense de General Pinto -de donde es oriundo- durante los primeros años de la presidencia de Mauricio Macri y era, según quienes lo conocieron en la ciudad, “un militante sumamente activo”.
En el 2017, intentó presentarse a candidato como Consejero Escolar suplente de la ciudad bonaerense, pero cayó de la lista pocos meses antes de que se celebraran las elecciones.
Un miembro del partido en la ciudad recuerda: “Era un chico muy comprometido con Cambiemos, nacido y criado en Pinto, pero en el último tiempo no fue parte del equipo. Se reformuló el equipo interno y quedó afuera, no tenía muchos seguidores, Ariel planteaba una ruptura interna en el movimiento a nivel local”.
Finalmente, Muñiz fue candidato “por la suya, y solo por Facebook, nunca hubo una boleta con su nombre”.
Muñiz creó una página de Facebook llamada “Pro General Pinto”, que no tenía relación institucional alguna con ese espacio en la ciudad bonaerense. Allí llegó a publicar afiches diseñados por él mismo, en los que aparecía su nombre y los logos de Pro y Cambiemos. Se presentaba como una suerte de candidato del espacio político.
De hecho, en esa misma red social llegó a publicar un escrito en el que parecía autopostularse como intendente de General Pinto:
“INTENDENCIA
Si me preguntasen, si quiera ser candidato a INTENDENTE por General Pinto respondería que si. Tengo al menos cuatro proyectos, claras convicciones de las políticas públicas que puedo llevar a cabo, en un supuesto.
Entiendo perfectamente, lo que significa y a lo que conlleva, el trabajo en equipo.
El presidente de la nación Argentina, y la gobernadora de la provincia lo expresan desde que tomaron el mando.
Digamos, durante la gestión de éste nuevo equipo.
Considero que, en éstos pocos años, como militante PRO he sido leal a mis principios, y a un partido político (Propuesta Republicana), relativamente nuevo, adaptado al siglo XXI.
He sido “empleado” varios años en mi vida, esto expreso en mi
curriculum vitae, ahora elijo ser emprendedor independiente, cuidar mi vida privada Y LA DE MI FAMILIA, y poder al menos en una época difícil, generar empleo, y que las expectativas crezcan.
¿Puedo hacerme cargo de semejante investidura y representación de la ciudad? Claro, lo pensé muchas veces, lo tengo planificado hace varios años ya, tengo una planificación política (estrategia, al menos ahora que soy un civil) que podrá expresarse de forma ordenada en el transcurso de al menos cuatro años.
Gracias.
Francisco Ariel Muñiz”.
Muñiz había solicitado una audiencia con el presidente durante 2018, la cual había sido rechazada.
Fuentes policiales aseguraron que en los últimos meses, Muñiz se había convertido en “un artesano habitué a las rejas de la Casa Rosada”. Hasta el momento, tenía un domicilio a su nombre en la calle Páez en San Justo, su dirección fiscal principal que declaró ante la AFIP.
Sin embargo, vecinos en el barrio recuerdan vagamente su cara y no saben nada de él. La casa que alquilaba hace varios años que tiene otros inquilinos.
Su último trabajo en blanco precede a sus días en política, dos años en una empresa de reparación de maquinaria en Mar del Plata, donde también tuvo una dirección registrada.
Hoy, Muñiz enfrenta una acusación grave, imputado de un delito federal.