Ciberbullying: crecen las denuncias por “discriminación digital”
La discriminación en Internet se multiplicó por diez en los últimos diez años de acuerdo a las presentaciones realizadas ante el Inadi, que relevó las denuncias recibidas en ese período. “Antes ocupaban el 3% de los reclamos al Instituto y ahora superan el 30%“, se consignó en el último informe del Observatorio de Internet.
El organismo viene realizando una serie de campañas junto a Unicef contra el ciberbullying. Una de las más recientes fue durante el último festival Lollapalooza en el que se invitó a los jóvenes “a tomar conciencia sobre la responsabilidad de construir una internet libre de discriminación”. En este tipo de iniciativas, los adolescentes se asesoran sobre el ciberbullying y participan de iniciativas como la campaña “#NoDaCompartir”. “Esta es una oportunidad de acercarnos a los chicos, que son el futuro, para trabajar juntos para prevenir la discriminación digital y reflexionar sobre la llegada que permiten los medios y las consecuencias en la vida real que sufre una persona que está siendo víctima de acoso”, dijo Claudio Presman, titular del Inadi.
#NoDaCompartir es una campaña de comunicación que busca concientizar a los más jóvenes para detener en las redes sociales el ciberbullying, a partir de una acción participativa como es no reproducir los mensajes discriminatorios.
Según un estudio de UNICEF, en Argentina, 6 de cada 10 jóvenes se comunica a través del celular y 8 de cada 10 usan internet. Actividades como chatear, jugar en línea, buscar y compartir información y contenidos son acciones cotidianas en el ejercicio de su ciudadanía digital. “En este estudio el ciberbullying aparece como la experiencia negativa más mencionada. Este es un dato importante si tenemos en cuenta que chicos y chicas construyen su identidad interactuando tanto en la vida real como en la virtual”, explican desde el área de Comunicación de UNICEF Argentina.
Desde el INADI explican cómo hacer la denuncia gratuita si fuiste víctima de discriminación en Internet:
1. “Lo primero que tenés que hacer es reclamar a través de los mecanismos internos que te ofrece la red social o el sitio web donde sufriste discriminación. Cumplir con este primer paso es importante porque en caso de que el contenido no sea dado de baja, es un antecedente que le permite al Observatorio de la Discriminación en Internet comenzar las gestiones para lograr la baja del material ofensivo o la cancelación de la cuenta de quienes que lo produjeron”.
2. “Una vez cumplido el paso anterior, podés hacer tu denuncia ante el INADI al 0-800-999-2345 o a través de la siguiente dirección de correo electrónico: observatoriointernet@inadi.gob.ar”, apuntaron desde el organismo.
La licenciada en psicología y psicopedagogía, y docente universitaria, Gabriela Renault destaca que “hoy la intimidación persiste hasta la edad adulta y no tiene ningún calificativo compensatorio, hoy la marca es el acoso, la persecución, es un acto repetitivo, agresivo hecho para abusar o intimidar al otro, corrimos los márgenes y hoy el acoso se lo denomina bullying. Puede asumir diversas formas, sobre todo verbal, emocional, cibernético denominado grooming que acicala al otro y físico”.
“De no estar atentos, a este acoso u hostigamiento, los daños serán mucho más graves. Los efectos siguen a lo largo de la vida. Las bully-víctimas, generalmente se convierten en sujetos solitarios, pueden causar agorafobia, ansiedad generalizada, pueden ser más impulsivos y agresivos y pueden también padecer trastornos de pánico, o muchas veces, hasta suicidios”, advirtió la doctora.
Debemos estar atentos, aconseja Renault, porque “el acoso es costo para el sujeto y para toda una sociedad. Quizás la pista de por dónde empezar sea reactivar conductas pro-sociales, crear sujetos con mejor autoestima, animarse a mirarse en el propio espejo y no en el ajeno. Dumbo tiene orejas muy grandes y es la risa de los que van al circo, hasta que con esas mismas orejas, aprende a volar y eso lo diferencia y lo hace único. Estamos a tiempo de frenar el circuito, de hablar con nuestros hijos, nuestros estudiantes, nuestros compañeros de trabajo, para poder transformar en talentos, nuestras diferencias y sino al menos respetarlas”, concluyó la experta.
TN