Los restos descuartizados hallados en la villa 31 son de una mujer e imputan a su pareja
Los restos humanos descuartizados que fueron hallados ayer una casa de la villa 31 del barrio porteño de Retiro pertenecen a una mujer de nacionalidad paraguaya que vivía allí con su pareja, que quedó imputada aunque aún no fue detenida, informaron hoy fuentes policiales.
Como resultado de las pesquisas realizadas por los peritos de la Policía de la Ciudad se logró determinar que en la escena del crimen no se encontraban dos cadáveres, como supusieron en un principio los investigadores, sino que se trataba de Liliana González (37), la mujer que residía en la casa.
Los voceros indicaron que, a raíz de ese descubrimiento, fue imputada su pareja, Waldo Servian Riquelme (33), quien fue visto por última vez el sábado último por la tarde y por el momento no pudo ser localizado por la policía.
Por ese motivo, el fiscal en lo Criminal y Correccional 14, Andrés Madrea, quien interviene en la investigación, ordenó su captura y prohibición de salida del país.
El hallazgo de los restos se produjo ayer en la casa 108 de la manzana 110 de la calle 13 del mencionado barrio de la Ciudad de Buenos Aires, donde vivía la pareja de extranjeros.
La Policía porteña fue convocada al lugar porque los vecinos comenzaron a sentir olores nauseabundos provenientes del domicilio y, cuando tocaron la puerta, ninguno de los integrantes de la pareja contestó.
Además, algunos de sus familiares dijeron que no sabían nada de ellos desde el sábado a las 17, por lo que ante este panorama, la policía decidió irrumpir al domicilio, previa autorización judicial.
Los efectivos de la Unidad de Prevención Barrial 4 y de la Comisaría Comunal 1 que intervinieron e ingresaron al domicilio, no detectaron puertas ni ventanas forzadas ni desorden en el lugar, pero al llegar al baño encontraron los primeros restos humanos desmembrados.
En la planta superior también se hallaron otros restos cadavéricos, aunque alrededor de un perro, por lo que se investiga si hasta allí fueron trasladados por el propio can.