El Senasa decomisó 650 kilos de carne y chacinados no aptos para el consumo
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) decomisó el último fin de semana 650 kilogramos de carne bovina con hueso y chacinados que no eran aptos para el consumo, detectados durante diversos controles a vehículos por agentes de la barrera zoofitosanitaria patagónica.
Según informó el Senasa en un comunicado, en el primer caso, un vehículo que se dirigía desde Santa Rosa (La Pampa) hacia la ciudad capital de Neuquén, fue inspeccionado por personal de la barrera zoofitosanitaria patagónica del Senasa y en su interior, debajo de un nailon negro, iban ocultos 52 costillares bovinos.
“La mercadería, que tiene el ingreso prohibido a la región, no cumplía con las condiciones indispensables para su conservación y consumo”, indicó el organismo, y agregó que “ante estas faltas, y en resguardo de la salud pública y la sanidad animal, los agentes del Senasa decomisaron y destruyeron los productos”.
Por otra parte, en un control de ruta realizado por la patrulla móvil del organismo en la localidad neuquina de Senillosa, agentes del Senasa decomisaron cerca de 90 kilogramos de chacinados que eran transportados sin documentación sanitaria y sin rotulación en un vehículo que no contaba con habilitación procedente de la ciudad de Neuquén con destino a Zapala.
“La falta de rotulación implica que no se puede identificar a los responsables de la elaboración de la mercadería, lo que impide efectuar su trazabilidad en caso de una intoxicación alimentaria”, explicó el Senasa.
Por último, en el puesto ubicado en la localidad de Río Colorado, agentes del Senasa decomisaron ayer 40 kilogramos de carne de cerdo con hueso.
“Se trataba de un producto de ingreso prohibido a la región que cuenta con el estatus sanitario de área libre de fiebre aftosa sin vacunación”, concluyó el comunicado del Senasa.