Un hombre murió tras ser torturado durante una entradera para que entregara un maletín
Un hombre de 51 años murió luego de ser torturado por delincuentes que lo golpearon y lo asfixiaron con toallones alrededor del cuello y con agua para que les revelara dónde guardaba un maletín, en una casa de la localidad bonaerense de Bernal.
La víctima fue identificada como Abel Leonardo Espósito y el hecho ocurrió en la calle Avellaneda, entre Belgrano y Lavalle.
El testimonio más importante recolectado hasta el momento es el de una mujer de 61 años. Dilma trabaja para la familia y vive en el fondo de la propiedad.
Contó que entre cuatro y cinco ladrones se metieron a la casa y que buscaban “un maletín, dinero y otras pertenencias”.
También precisó que Espósito fue salvajemente golpeado por los delincuentes y que, a pesar de la asistencia del SAME, murió minutos después del ataque, que se inició aproximadamente a las 5 de la mañana de este lunes.
Policías de la Comisaría N° 2 de Quilmes -ubicada a dos cuadras del lugar del crimen- llegaron a la casa cuando creían que aún estaban allí los ladrones, mientras Espósito ya estaba muerto y la empleada doméstica maniatada y encerrada en una habitación.
Tras descartar la presencia de los delincuentes, se inició una búsqueda por las casas vecinas, que resultó negativa.
Un vecino contó que se ve patrullaje pero que igual se meten y roban. Que Espósito vive allí con su mujer y dos hijos, aunque el resto de la familia está de vacaciones y en estos días solo estaba con la empleada.
