Milagro: se recupera el joven que voló con su auto desde la General Paz
El Colo Avila, el chico de 19 años que hace apenas una semana iba a gran velocidad por la General Paz, perdió el control del auto y voló sobre Libertador, se recupera en el hospital Fernández y, aunque debió ser operado otra vez este jueves y viernes, y tendría que someterse a otras intervenciones, sus familiares afirmaron que está bien y evoluciona. Pese a lo espectacular del impacto y las graves heridas que sufrió, Patricio permanece estable y lúcido.
“Paciente que continúa orientado, lúcido, colaborador, estable, respirando espontáneamente, cumpliendo posoperatorio de reparación quirúrgica de cadera izquierda y peroné izquierdo. En el día de hoy se realiza cirugía reconstructiva de órbita derecha. Continúa internado en unidad de cuidados críticos”, dice el parte difundido este viernes por el hospital Fernández.
En diálogo con Clarín, el tío de Patricio dijo que el “el Colo” está bien, que lo cuidan sus padres y que “va a seguir internado durante un tiempo más”.
Patricio sufrió un neumotórax derecho, luxofractura de cadera izquierda, fractura de tobillo izquierdo y de seno frontal y techo de la órbita derecha, con neumoencéfalo craneal.
El siniestro vial ocurrió cerca de la 1 del viernes pasado, cuando Patricio conducía el Voyage blanco de su padrastro por la General Paz en dirección al Río de la Plata. Por causas que se desconocen, intentó doblar en la salida hacia la Provincia. Como circulaba a alta velocidad, no pudo tomar la curva, embistió el guardarrail y salió volando. Aunque aún no se determinó la velocidad exacta, el velocímetro quedó clavado en 170 km/h.
En ese lugar, la altura de la General Paz es de unos 12 metros, que equivale a un edificio de aproximadamente cuatro pisos. A esto hay que sumarle que la avenida del Libertador tiene unos 40 metros de ancho.
Según los cálculos realizados por expertos en seguridad vial, un impacto a 60 kilómetros por hora equivale a caer desde 14 metros, o desde un quinto piso. En este caso, debe sumarse a la velocidad a la que venía el auto, la altura de la General Paz.
Fuente: Clarín