Aerolíneas eliminará la clase ejecutiva de sus vuelos de cabotaje y regionales para competir con las low cost
Aerolíneas Argentinas anunció que eliminará la clase ejecutiva de sus vuelos de cabotaje y regionales e invertirá US$15 millones para modificar los interiores de cabina de sus 31 aviones Boeing 737-800 para pasar de 170 asientos a entre 186 y 189.
De esta manera, sumará alrededor de 500 plazas, lo que es equivalente en asientos a tres aviones extra o, dicho de otro modo, se podrá transportar un 10% más de pasajeros con la misma cantidad de aviones.
Además de los Boeing 800, la idea es que a medida que se reemplacen los 24 Embraer de la flota también se reconfiguren los interiores para sumar entre 16 y 19 asientos a cada aeronave.
De acuerdo con el presidente de Aerolíneas, Mario Dell´Acqua, en cabotaje solo el 30% de los pasajeros pagaba la clase ejecutiva, mientras que, para los vuelos regionales, estará la opción de ofrecer el asientoEconomy plus, que es que en las tres primeras líneas se dejará libre el asiento del medio para quien quiera viajar más cómodo.
Consultado acerca de sus supuestos dichos acerca de que Aerolíneas podría adoptar modalidades low cost, Dell ´Acqua aclaró que hay cosas que las low cost copian de las aerolíneas de bandera y viceversa. “Esto que estamos anunciando es un ejemplo. Es algo que antes hicieron laslow cost y también nuestra competencia regional. Igual, conceptualmente, siempre vamos a privilegiar el buen servicio, la puntualidad y la frecuencia”, afirmó.
Con la activación de esta modalidad, para 2020 los ahorros en materia de gastos operativos alcanzarán los US$73 millones, gracias a la reducción de un 10% de los costos por los asientos, los cuales están asociados a la eficiencia en el uso de combustible, gastos de mantenimiento y otros costos asociados de la operación.
En el anuncio en el Aeroparque Jorge Newbery también estuvo presente el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien dijo que en la clase ejecutiva de los vuelos de cabotaje y regionales “había mucho pasajero de la política” y que era “un sistema de preferencias que no es correcto cuando la empresa es subsidiada por todos los argentinos”.
En este sentido, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, señaló que se está cumpliendo el plan de reducción programada de los subsidios y que este año la ayuda a la empresa de bandera será de US$90 millones, pero que con el mejor uso de la flota, el ahorro en algunos insumos y la política de transparencia “el año que viene se va a cumplir lo del subsidio cero”.
Fuente: La Nación
