Con apoyo para la mudanza de la capital
Un sondeo de la Consultora Equis señaló que un 47 por ciento de los encuestados está de acuerdo con la propuesta de cambiar la sede de la Capital. El 26 por ciento se pronunció en contra. Las razones del respaldo.
El proyecto de mudar la Capital Federal tiene una aceptación del 47 por ciento de la población, según muestra una encuesta de la Consultora Equis, que testeó la propuesta a nivel nacional con esos resultados de aprobación. El principal motivo del respaldo es que Buenos Aires es percibida como una ciudad con mucha concentración, saturada. Para los entrevistados, esto genera falta de empleo y aumento de la delincuencia.
La encuestadora de Artemio López hizo la medición entre el 28 y el 30 de agosto, después de que la idea de trasladar la Capital fuera considerada por la presidenta Cristina Kirchner como un tema que deber ser puesto nuevamente en la agenda política. El tamaño de la muestra realizada por Equis fue de 1132 casos, con entrevistas personales telefónicas a mayores de 18 años de todos los niveles socioeconómicos residentes en los principales aglomerados urbanos del país.
El grado de acuerdo con la propuesta de mudanza de la Capital al interior resultó del 47,1 por ciento de los consultados, mientras que un 26,9 por ciento se manifestó en contra. Para el 13,7 el tema fue indiferente, mientras que un 12,3 contestó no saber.
La consultora pidió a su vez, a los que apoyaron el traslado, que explicaran los motivos de su respaldo. “Entre los argumentos en favor los encuestados señalaron que hoy existe mucha concentración y saturación de población en la actual Capital Federal, y esto genera falta de empleo, con consecuencia en un aumento de la delincuencia”, indicó Artemio López. Otra razón ofrecida es que “el mudar la Capital reordenaría el territorio, desconcentrando a la Ciudad de Buenos Aires y la zona metropolitana en la cual se encuentra mucha gente hacinada y sin poder trabajar”.
Los consultados –siempre hablando del grupo que apoya el traslado– dijeron además que creen que se generaría una mayor oferta de trabajo en todo el país.
“A su vez, el proceso se vería acompañado de una mayor distribución de recursos y empresas, aportando a la equidad en la repoblación del país y su actividad económica, incrementando el crecimiento económico de las provincias, el desarrollo y expansión de todo el país, con mayor educación y salud para los actuales pueblos del interior y a la creación de más ciudades y menos pueblos pobres”, agregó López. Es decir que la idea predominante es que, como el norte del país es un territorio con poca población y habitantes, el traslado de la Capital traería un beneficio doble, de desarrollo al norte y de descentralización a la CABA.
En el menú de alternativas sobre cómo se desconcentrarían mejor la Capital y el área metropolitana, aparecieron cuatro posibilidades más. La primera fue la propuesta de incentivar nuevos polos económicos en las provincias (33 por ciento). En segundo lugar apareció el traslado de la Capital al interior (22 por ciento). Como tercera opción figuró la creación de incentivos desde el Estado para que la población se establezca en el interior (18 por ciento), y en el cuarto lugar, con el mismo porcentaje, el traslado de ejes de actividades laborales de la CABA al interior de la provincia de Buenos Aires.
Con menciones menores aparecieron las ideas de reordenar el tránsito y los ingresos a la Capital (6 por ciento), control de la migración (3 por ciento) y creación de planes de vivienda en el interior del país (3 por ciento), entre otras.
En cuanto a los argumentos de quienes se manifestaron en contra, el encuestador explicó que “no tuvieron mayores contenidos que el de los gastos desmedidos que implicaría mudar la Capital. Muchos detractores de la propuesta expresaron no saber por qué no les gusta. Dijeron solamente que ‘no serviría’, o afirmaron que ‘hay cosas más importantes’ para hacer. También se mencionó que el intento de traslado de la Capital ‘ya fracasó durante el gobierno de Alfonsín’”.
El proyecto de mudar la Capital es impulsado por el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, que propuso para el nuevo emplazamiento a la provincia de Santiago del Estero.