Lanzan la Beca Progresar para estimular a jóvenes a que terminen sus estudios
Un día después de que el presidente Mauricio Macri anunció recortes y ajustes en el antipático gasto político del Estado, el Gobierno acaba de comunicar el aumento de otro gasto, de orden bien distinto: una suba de entre el 16 y más del 66 por ciento en el Programa Progresar, que ahora pasa a llamarse Beca Progresar, que beneficia a jóvenes vulnerables de entre 18 y 24 años y los incentiva a terminar sus estudios primarios, secundarios, terciarios y universitarios y formarse para el trabajo. La Beca Progresar contará con un presupuesto de 10 mil millones de pesos para 2018.
Como contrapartida, demandará mayores exigencias de rendimiento académico tanto en la educación obligatoria como en el nivel universitario y terciario. Al mismo tiempo, continúa con el carácter social del incentivo, que sigue privilegiando a jóvenes de ingresos familiares bajos.
“Nuestro compromiso con la educación desde el primer día es total. Queremos que cada vez más jóvenes estudien pero también que se reciban para poder encontrar su camino porque al no recibirse van a encontrar frustración”, sostuvo Macri, quien destacó que entre los sectores más vulnerables, solo uno de cada 100 chicos se recibe en la universidad. Macri prometió una Beca Progresar para cada joven que lo necesite.
Por su parte, Finocchiaro, a quien el presidente llamó “Fino” en repetidas ocasiones, se refirió al compromiso del Gobierno con la educación como motor de desarrollo.
En qué consisten las Becas Progresar
“Nuestro gobierno desde el mismo momento que asumió tomó la decisión que la educación fuese la fuente del crecimiento argentino. Pensamos en el año 2030 como anhelo que es el año en que quienes hoy empiezan su escolaridad van a terminar la escuela secundaria”, sostuvo Finocchiario en el acto de lanzamiento.
“Este programa tiende a que el Estado esté presente apoyando a que quienes más lo necesitan puedan cursar en sus estudios, avanzar y recibirse. En este gobierno creemos que la verdadera inclusión, para que sea verdadera, tiene que recibirse, tiene que obtener su título”, agregó.
La medida es parte de un paquete de cambios significativos que impactarán en Progresar, un programa de subsidio iniciado por la ex presidenta Cristina Kirchner en enero de 2014, que a partir de ahora introduce una escala de montos diferenciados según el nivel educativo y según el carácter estratégico de las carreras universitarias; incluye un componente de “mérito”, que premia económicamente a los estudiantes universitarios de Progresar con mejor rendimiento académico; establece mayores exigencias educativas a sus beneficiarios en todos los niveles educativos y sale de la órbita del Anses para pasar al ministerio de Educación.
“El Programa Progresar fue concebido casi como un subsidio, no había una lógica educativa”. Así lo explicó el ministro de Educación nacional Alejandro Finocchiaro.
“Para nosotros, la lógica no es que el chico simplemente esté en la escuela o en la universidad. Para nosotros progresar significa que se gradúe. Por eso ahora es una beca, porque le estamos pidiendo a los beneficiarios un compromiso, que asuma una responsabilidad”, detalló.
Según los últimos datos oficiales de diciembre de 2017, los beneficiarios del Plan Progresar llegan a 635.456 en todo el país, de los cuales 226.484 cursan estudios terciarios, 235.338 estudios universitarios, 133.708, están en el nivel secundario; 4.674 asisten al Plan Fines de terminalidad del secundario; 4431 buscan completar la escuela primaria y 821 asisten a cursos y talleres técnicos.
Todos son jóvenes de sectores vulnerables de entre 18 y 24 años, cuyos grupos familiares no ganan más del equivalente a tres salarios mínimos vitales y móviles, que hoy es de $9500. Todos cayeron del sistema educativo y ahora buscan reintegrarse.