Un funcionario con pasado oscuro
Se puso la lupa sobre Carlos Alberto Bulaievsky, el director técnico y administrativo de la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, que encabeza Claudio Avruj.
El funcionario ingresó al Estado durante el gobierno del presidente Mauricio Macri en la categoría A, grado 1 de la Sindicatura General de la Nación (Sigen) por una decisión de la Jefatura de Gabinete aun cuando no cumplía con los requisitos mínimos para acceder a aquel nivel.
De ahí pasó a la ex ESMA a las órdenes del actual secretario, donde trata básicamente asuntos del personal. Los trabajadores constataron a su llegada algo que ya se sabía, pero que no excedía las fronteras del mundo del fútbol.
Bulaievsky había sido expulsado de Atlanta tras una denuncia que recibió por defraudación y administración fraudulenta en el pase del delantero Luis Bonnet al club Gimnasia y Tiro de Salta.
Los delitos que le imputaban se basaron en esa operación firmada el 22 de enero de 1998. Pasaron casi veinte años, pero, si la causa judicial prolongó su vigencia, se debió a que el actual funcionario alargó los plazos procesales con el pedido de una probation que en primera instancia no cumplió.
De los 30 mil pesos-dólares de la Ley de Convertibilidad que la institución de Villa Crespo le reclamaba por un cheque que quedó en su poder, no había devuelto un peso cuando lo denunció la comisión directiva.
Por eso, y después de un sobreseimiento en primera instancia, el 11 de abril de 2011 la Cámara de Casación Penal, Sala 2, dio vuelta la resolución que beneficiaba a Bulaievsky con la probation.
El tribunal consideró que no se había llevado a cabo “la pericia caligráfica solicitada por la querella y tendiente a establecer si el encartado habría participado en la adulteración de los cheques cuestionados”. Trece años después de la transferencia de Bonnet al club salteño.
Al continuar los efectos del juicio penal, el ex presidente se comunicó con los abogados de Atlanta para resolver la cuestión civil y se comprometió a saldar su nuevo compromiso de pago. “Fue en ese momento que nos pidió hacer una asamblea para tratar de revisar su reincorporación como socio y se decidió expulsarlo de por vida. Yo estuve en la asamblea”, le cuenta una fuente del club a Página 12.
Bulaievsky pagó en el marco de ese acuerdo “pero muchísimo menos, fue muy bajo para Atlanta, no recuperamos de ninguna forma el total del perjuicio para el club”, completó el informante que tiene conocimientos jurídicos. La denuncia por el pase de Bonnet también alcanzaba al secretario general Carlos Eduardo Rada, compañero de comisión directiva y amigo del contador que ahora trabaja con Avruj.