Macri buscará una foto con los gobernadores el mismo día de la sesión
Una foto con la mayoría de los 24 gobernadores, pero en especial con el grueso de los 19 no oficialistas, podría ser la llave para lograr este lunes la aprobación de la convulsionada reforma previsional. Al menos, es la estrategia que manejaban esta mañana en la Casa Rosada, tras la escandalosa sesión de ayer, que terminó levantada y con serios incidentes afuera y adentro del recinto.
El clima en Gobierno es de acotada autocrítica. “No preveíamos este nivel de violencia. Sí sabíamos que se podían juntar los K, la izquierda y los massistas”, reconoció una fuente oficial.
De todos modos, para escrachar a la nueva alianza opositora, varios operadores oficialistas se ocuparon anoche de repartir la foto en la que se ve al massista De Mendiguren abrazado con el K Agustín Rossi, al sindicalista Facundo Moyano riéndose con Axel Kicillof y hasta a Nicolás del Caño, de la izquierda, como alegre acompañante de la escena.
En el oficialismo insisten en que los números para dar quórum y aprobar el proyecto que prevé, entre otras cosas, el cambio en la fórmula para calcular el aumento a los jubilados y beneficiarios de la AUH, “estuvieron y están. El problema es que con ese nivel de violencia no se podía bancar una sesión de 20 horas. Es lo que le explicaron (Emilio) Monzó, (Nicolás) Massot y (Luciano) Laspina a Macri”.
A modo de prueba matemática, en Gobierno mostraron a Clarín un papel con un punteo que tenían el día anterior a la sesión. Daba exactos 129. “Y en el recinto en un momento hubo 131. No fue ni es un problema de números. El kirchnerismo y la izquierda vieron que no podían frenar el proyecto y salieron a romper todo”, agregan.
Clarín y De la Bahía