Nació con una deformidad en la cara y se casó tras 14 años de cirugías
Cody Hall es una joven británica de 25 años que se casó la semana pasada y demostró al mundo que los finales felices sí existen, tras someterse a 18 operaciones en su vida por una grave deformidad en su rostro.
Cody nació con un enorme hemangioma en el lado izquierdo de su cara, que su familia creyó que la condicionaría de por vida. Sin embargo, nunca bajaron los brazos y dedicaron años de esfuerzo para que su hija viviera como cualquier ser humano.
En los años 90, la familia Hall lanzó una campaña solidaria para recaudar los 300 mil dólares necesarios que Cody necesitaba para viajar al hospital Roosevelt, en Nueva York, para su primer tratamiento en 1993, cuando sólo tenía un año de vida.
En sus 25 años, la valiente Cody se sometió a 18 operaciones, incluyendo estiramientos faciales, rinoplastía, injertos de piel, liposucción, dermoabrasión, cirugía ocular y láser.
Finalmente, tras ocho años de noviazgo, la muchacha concretó su matrimonio con Lewis Holt, de 27 años, en la iglesia de San Miguel en Great Oakley, Northamptonshire.
“Hay un final feliz”, les dijo una muy emocionada Cody a los invitados a su boda. “Fue un día emocionante y hubo algunas lágrimas, especialmente cuando vi a Lewis en el altar, pero solo lágrimas de alegría”.