Aerolíneas Argentinas podría dejar de volar a Roma y Nueva York
El Gobierno está “estudiando” el levantamiento de rutas internacionales de Aerolíneas Argentinas, a Nueva York y Roma,como respuesta al conflicto con cinco de los seis gremios aeronáuticos, que ya se tradujo en un paro general a fines del mes pasado y en nuevas cancelaciones de vuelos en los últimos dos fines de semana.
“El daño que generaron los pilotos internacionales de Aerolíneas es irreversible y afecta en el mediano y largo plazo a la empresa. Y eventualmente nos va a llevar a tomar decisiones que no son las que queremos tomar, que son las que se toman como consecuencia de esta forma de actuar totalmente irracional y que atenta contra la empresa”, dijo ayer el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, durante la conferencia anual de la Latin American and Caribbean Airlines (ALTA), en Puerto Madero.
Hace dos semanas, Aerolíneas decidió reducir durante todo diciembre sus frecuencias hacia Barcelona, de cinco a tres por semana. La decisión, según la empresa que encabeza Mario Dell’Acqua, fue por “la negativa de las tripulaciones a aceptar reprogramaciones”. Ahora, desde Transporte, confirmaron que estudian achicar aún más el negocio internacional de Aerolíneas. “Si (los gremios) siguen con esta actitud, vamos a tener que levantar rutas, se están estudiando cuáles. Pueden ser Nueva York o Roma”, dijeron.
La Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) encabeza el plan de lucha de cinco de los seis gremios aeronáuticos, junto a los mecánicos (APTA), jerárquicos (UPSA), personal de tierra (APA) y pilotos de Austral (UPSA). El martes, los titulares estos gremios se reunieron con Hugo Yasky, secretario general de la CTA de los Trabajadores, la central sindical que responde al kirchnerismo. Durante ese encuentro, los aeronáuticos reiteraron su “lucha” contra la “nociva” política aerocomercial del Gobierno. De los seis gremios que enrolan a los trabajadores del grupo Aerolíneas/Austral, el único que no está en conflicto es el gremio de los aeronavegantes (AAA).
Casi a la misma hora, Dietrich cargaba duro contra los gremios. “Hay una confusión muy grande por parte de gente que dice tener impregnada en su corazón a Aerolíneas Argentinas: la forma que encuentra para mejorar su situación personal es lastimar a esa empresa que supuestamente defiende. Muchos de estos pasajeros, acá hay dos expertos del sector a quienes dejamos varados en el vuelo a Miami del domingo, no van a elegir más a Aerolíneas, hagamos lo que hagamos. Como decimos acá, el que se quemó con leche, ve una vaca y llora”, dijo. Y agregó: “Si como sindicato mi objetivo es que una persona trabaje un día por mes, se distorsiona cuál es la misión y la visión que tiene que tener un representante sindical. En gran parte de los sectores en los que nosotros interactuamos en la Argentina (portuario, ferroviario) la discusión que hoy estamos teniendo con los sindicatos es cómo mejorar la productividad. Es una discusión muy transparente. No estamos buscando ni que haya menos empleo ni que la gente gane menos”.
La pulseada entre Gobierno y gremios comenzó con la paritaria salarial de Aerolíneas, que sigue abierta: los gremios reclaman una recomposición salarial del 26%, en tanto Aerolíneas contraofertó un 16%, si bien fuentes cercanas a las negociaciones señalaron que considerando beneficios extra la oferta real llega al 20%. Pero tras el paro del 31 de octubre, el titular de Aerolíneas, Dell’Acqua, planteó que el conflicto va más allá de lo salarial. “Acá nos están queriendo imponer cómo manejar la compañía”, dijo.
Dietrich había dejado ayer una puerta abierta al diálogo, al afirmar que esperaba un gesto “racional” de los gremios “que sea el comienzo de un camino para mejorar la productividad del sector”. Pero tras la difusión de la foto de los caciques aeronáuticos con Yasky, el discurso volvió a endurecerse con la amenaza de levantar Roma y Nueva York.
Fuente: Clarín