En el Día del ACV: regla mnemotécnica para recordar señales de alerta.
El 29 de octubre se celebra en el mundo el Día del ACV. El objetivo es concientizar sobre el accidente cerebrovascular, afección causada por la súbita pérdida de flujo sanguíneo cerebral (isquémico) o por el sangrado (hemorrágico) dentro de la cabeza, registró AIM. En la Cumbre del ACV que se realizó el 25 de octubre en Buenos Aires, la Fundación Eneri informó que “cada vez más personas reconocen los factores de riesgo pero aún falta reaccionar frente a los síntomas”. En ese marco, también se presentó la campaña “Socoorré”, que hace referencia a una regla mnemotécnica para recordar de manera sencilla las señales de alerta.
Factores de riesgo en el ACV
En detalle, estos son los principales factores de riesgo para un accidente cerebrovascular donde se puede actuar para prevenir su ocurrencia (la mayoría son extrapolables al infarto de miocardio):
Sobrepeso u obesidad
Dieta no saludable
Falta de ejercicio físico
Niveles altos de colesterol, LDL colesterol y triglicéridos
Hipertensión arterial
Distrés (exceso de estrés)
Diabetes
Consumo de tabaco o contacto con el humo de otras formas
Consumo excesivo de alcohol
Ciertos medicamentos
Reduciendo los factores de riesgo, se reducirá el riesgo de accidentes cerebrovasculares y, asimismo, el infarto de miocardio y otras enfermedades vasculares.
¿Cómo se manifiestan los accidentes cerebrovasculares y qué se debe hacer?
Cuidado con el dolor de cabeza grave súbito sin causa conocida.
En los accidentes cerebrovasculares mayores (la forma más grave de ACV), el síntoma más frecuente es una debilidad muscular repentina en el rostro, el brazo o la pierna, casi siempre de un solo lado del cuerpo. Otros síntomas consisten en la aparición abrupta de:
Dolor de cabeza grave súbito sin causa conocida, una alerta de ACV.
Dolor de cabeza intenso sin causa aparente
Adormecimiento del rostro, el brazo o la pierna, especialmente de un solo lado del cuerpo
Confusión, dificultad para hablar o comprender lo que se dice
Dificultad para ver con uno o ambos ojos
Dificultad para caminar, mareos, pérdida del equilibrio o de la coordinación
Desmayo o pérdida del conocimiento
Los efectos del accidente cerebrovascular dependen de la parte del cerebro que se haya afectado y del grado de afectación. Los ACV pueden dañar únicamente una parte del cuerpo, por ejemplo, la cara, un brazo o una pierna, pero también pueden paralizar todo un lado. Si el accidente es muy intenso puede ocasionar la muerte en forma instantánea.
En los accidentes cerebrovasculares menores, también conocidos como accidentes isquémicos transitorios, se manifiestan de forma similar a los accidentes cerebrovasculares mayores, pero son más leves y duran poco tiempo, mayormente menos de una hora. Por lo general, la persona se recupera sin necesidad de tratamiento. Estos mini episodios son síntomas premonitorios que aumentan la posibilidad de sufrir más adelante un accidente mayor. Sin embargo, se puede sufrir un accidente mayor sin haber tenido nunca un accidente menor.