Caso Maldonado: no desalojarían el juzgado tomado por los mapuches
Desde el gobierno, están atentos y preocupados por la nueva toma de la comunidad mapuche al juzgado federal de Guido Otranto. La prioridad, por ahora, será no desalojarlos por la fuerza pública porque la Casa Rosada considera, por los informes que llegan, que los manifestantes están buscando un muerto o un herido para cambiar el eje de la investigación.
“Es muy difícil la situación porque están buscando un muerto o una víctima para desviar la investigación de la desaparición de Santiago Maldonado”, afirmaron desde el entorno presidencial.
“Tratamos de evitar por ahora un desalojo. Una de las líderes, Moira Millán, está adentro del juzgado advirtiendo que ante cualquier herido que haya esto lo va a ver todo el país. Es evidente que están buscando una víctima”, agregó otro funcionario que está en contacto con el juzgado de Esquel.
“Ellos exigen que renuncie Otranto, porque no reconocen la validez de los procedimientos del juzgado y el gobierno nacional porque vulneran sus valores, sus reglas y sus estilos de vida”, dijo un funcionario de la Casa Rosada con visible preocupación por las horas de tensión en el juzgado.
De todos modos, aunque los militantes de la comunidad mapuche hablan de “negociar” no parecen tener la más mínima voluntad de negociación. Según confiaron a La Nacion en la Casa Rosada, hay 14 varones y 8 mujeres que ingresaron al juzgado con la excusa de dejar un escrito y una vez adentro hicieron saber que el juzgado había sido tomado por la comunidad mapuche y pidieron una reunión con Otranto. El juez accedió a hablar, pero los mapuches exigieron entonces que debía estar presente una cámara del Canal 4 local para grabar la entrevista y ellos debían llevarse la grabación, a lo que el magistrado no accedió.
La Nación y De la Bahía
