Se sometió a un implante de mamas y quedó postrada
Una joven de Rosario se sometió hace siete meses a una cirugía para colocarse implantes mamarios, pero algo salió mal y hoy está postrada con daño cerebral.
Berenice Conte, quien recientemente cumplió 25 años, sufrió un paro cardíaco durante la operación y debió ser derivada a un sanatorio donde quedó en estado de coma. A pesar de que recuperó el conocimiento, no habla, ni camina y por reacciones nerviosas no puede estirar las piernas ni permanecer sentada erguida.
Su familia asegura que le diagnosticaron cien por cien de discapacidad y por ello, denunciaron por mala praxis al médico cirujano que la operó y al anestesista que participó de la intervención.
Marcelo Conte, padre de la joven, contó a La Capital que le dijeron que era una cirugía simple, pero poco antes de la hora pautada para retirarla del sanatorio lo llamaron para avisarle que la trasladaban a otro centro médico.
“Llegó sin oxígeno en el cerebro. No tenía reacción de ningún tipo. Entró a la unidad de terapia intensiva con un coma profundo y estuvo así unos meses”, contó el hombre.
La joven fue diagnosticada con un ACV isquémico y le tuvieron que hacer una traqueotomía para que pudiera respirar. Al salir del coma, le recomendaron a la familia someterla a una rehabilitación intensiva para tratar de que pueda volver a hablar y tragar.
Berenice trabajaba como recepcionista en el bar Rock and Fellers, estudiaba Relaciones Públicas y hablaba varios idiomas. Hoy, no puede valerse por sus propios medios, y sus padres y hermano se turnan para cuidarla todo el tiempo.
Aún no se resolvió si los médicos serán imputados por el hecho, que está caratulado como posible comisión del delito por lesiones gravísimas culposas.